Esta semana, un video antiguo ha estado circulando en Internet, uno que plantea una pregunta muy interesante: ¿hasta dónde llegarías para tu perro?
En West Memphis, TN, en 2003, Jarrod Martin observó desde el estacionamiento de su apartamento en llamas cómo su perro lloraba pidiendo ayuda desde adentro.
Insatisfecho por la labor del departamento de bomberos de que recuperarían al perro antes de que se extendiera el fuego, Jarrod tomó el asunto en sus propias manos.
Ante el humo y el calor nocivos de la llama, Jarrod subió al balcón de su apartamento del segundo piso y atravesó la puerta para salvar a su cachorro.
Desafortunadamente, Jarrod había sido advertido por la policía para que no ingresara al edificio, por lo que cuando regresó al estacionamiento a salvo (más un cachorro feliz) fue esposado rápidamente. Jarrod Martin fue finalmente citado por dos delitos menores: conducta desordenada y peligro imprudente.
Las autoridades defendieron sus acciones afirmando que si Jarrod hubiera sido dañado o atrapado, más bomberos se habrían visto obligados a arriesgar sus vidas para salvar a Jarrod.
Mira el audaz rescate en el siguiente video y ve ambos lados de la historia.