Siempre es doloroso perder a una mascota, especialmente si nos acompañó durante muchos años y era inseparable de nosotros. Todo el amor y compañerismo que nos regaló durante tanto tiempo es difícil de reemplazar, y eso lo sabe cualquier persona que haya amado a su mascota.
Cuando una mascota se va de este mundo, nos deja un gran vacío y muchos recuerdos de los bellos momentos. Pero para poder superar de manera más positiva este duro momento, la empresa Davenport Memorial Glass creó una forma original de mantener a nuestros amados animalitos cerca para no sufrir su ausencia.
Hacia el año 2003, Cameron comenzó a trabajar esta técnica que utiliza burbujas para crear objetos en vidrio. Sin embargo, todo cambió (y también su fama), cuando en 2015 murió un amigo suyo y decidió mezclar sus cenizas con el vidrio fundido para hacer algo nuevo y original.
Si bien esta idea comenzó usando cenizas humanas, pronto se dio cuenta de que las personas también sufren la muerte de sus mascotas, por lo que decidió usar las cenizas de estas últimas también
Para llevar a cabo estos bonitos objetos coloridos, Cameron les pide a sus clientes una cucharada de cenizas del animal que partió. Una vez que tiene esta cantidad, la mezcla con el vidrio fundido y le da la forma que el cliente le ha solicitado. Estos objetos pueden tener diversas formas, aunque la más pedida es la huella de gato, con el que las personas recuerdan a su gatito que ya no está.
Los diseños son realmente muy atractivos y de gran estética, por lo que se pueden usar para el hogar o llevarlos con uno mismo. De esta manera, aquella mascota que nos dio tanto amor y compañía durante tantos años, seguirá estando cerca nuestro.
El negocio de Cameron sigue creciendo y también su popularidad. Tanto es así que tuvo que dejar su otro trabajo, enfermero, para dedicarse exclusivamente a diseñar objetos de arte con cenizas de mascotas.