Un acuario ha dado la bienvenida a un pingüino bebe y los padres no son ni mas ni menos que un par de pingüinos del mismo sexo.
Las hembras de pingüinos Electra y Viola dieron la bienvenida a su polluelo adoptado en el Oceanogràfic Aquarium, Valencia, España.
La pareja adoptó el huevo de otra pareja de pingüinos y lo incubaron ellas mismas. Hasta ahora, se desconoce el sexo del pollito ya que los análisis de sangre para determinar esto no se pueden hacer hasta que tenga alrededor de seis semanas.
Electra y Viola son una pareja excepcional, de acuerdo con el cuidador de aves del acuario Carlos Barros, quien explicó que la pareja femenina comenzó a mostrar un comportamiento reproductivo común, como construir su propio nido con piedras. Con eso en mente, los cuidadores decidieron darles su propio huevo para que lo criaran.
Carlos dijo: "Ellos pusieron dos huevos cada uno dentro obviamente sin saber que no eran fértiles, así que pusimos uno de los huevos de una pareja diferente en su nido para que ellas pudieran cuidarlo".
Los machos también usan piedras en los rituales de apareamiento, que a menudo regalan una piedra a su pretendiente potencial, aunque personalmente creo que preferiría una caja de bombones o algo asi.
La incubación la llevan a cabo tanto la mamá como el papá (o mamá y mamá, en este caso) quienes toman turnos para mantener el huevo caliente. Luego, el huevo se rompe el día 38 y los polluelos se quedan con sus padres durante unos 75 días.
Electra y Viola no son la primera pareja femenina del mismo sexo en criar una chica. El año pasado, Marama y Rocky del Sea Life Centre de Londres también dieron la bienvenida a una chica. Los dos eran padres (madres) primerizos y el personal del acuario dice que habían mostrado buenas cualidades de crianza durante los últimos años al construir nidos, al igual que lo hicieron Electra y Viola.
Según Carlos, si bien la monogamia es común entre las parejas de pingüinos en los zoológicos y otros hábitats controlados, las parejas a menudo solo se mantienen fieles entre sí en la naturaleza durante la temporada de apareamiento. Y ahora siento que toda mi vida ha sido una mentira.